1. Daños causados por el lavado incorrecto o el uso de productos químicos que afecten el tejido o los colores de la prenda.
2.Cambios de tamaño o ajustes necesarios debido a fluctuaciones de peso del cliente después de la compra.
3. Daños causados por accidentes, como desgarros o rasgaduras debido a enganches con objetos afilados.
4. Alteraciones realizadas por terceros no autorizados, como ajustes de talla, modificaciones en el diseño original o cambios en la estructura de la prenda.
5. Pérdida o daño de accesorios o elementos adicionales que acompañan a la prenda, brillantes, broches o adornos.
6. Daños causados por el uso indebido de la prenda, como tirones excesivos, estiramientos o actividades para las cuales la prenda no está diseñada.
7. Decoloración o cambios en el tono de los colores debido a la exposición prolongada a la luz solar directa o a sustancias químicas.
8. Desgaste o deterioro de las prendas debido al contacto con superficies rugosas o ásperas.